Trabajar en una oficina limpia y confortable contribuye a que tu jornada laboral sea más agradable y la productividad sea más rentable
La limpieza de una oficina, sobre todo si es grande y con muchas personas en ella, no es una tarea sencilla, por ello, la mayoría de las empresas recurren a los servicios de limpieza externos que puedan llevar a cabo esta actividad de la mejor manera posible.
Hemos recurrido a las mejores empresas de limpiezas de oficinas Madrid, y nos ofrecen algunos aspectos más importantes que hay que tener en cuenta a la hora de pensar en cómo limpiar una oficina.
¿Por qué debes limpiar tu oficina?
Mantener la oficina limpia, desinfectada y ordenada tiene muchos beneficios desde el punto de vista empresarial.
Un entorno de trabajo libre de polvo, gérmenes y bacterias protege la salud de tus empleados, evitando la propagación de virus y enfermedades que afectan negativamente a la eficiencia laboral de tu equipo. Además, una limpieza adecuada de los espacios de trabajo tiene consecuencias tanto en la imagen de tu empresa percibida por los clientes como en la productividad en general: trabajar en un entorno saludable ayuda a estimular la creatividad y la calidad del trabajo de los empleados.
Sin embargo, se necesita un método de trabajo bien establecido y un equipo adecuado para limpiar la oficina correctamente.
Desde este punto de vista, es fundamental planificar el uso de productos específicos en función del tipo de superficie a tratar, ya que los componentes químicos de los productos reaccionan de forma diferente en función del material con el que entran en contacto. Por ello, la madera, el plástico, el cristal y el aluminio deben tratarse con productos específicos que preserven la calidad de los muebles.
Limpieza de suelos de oficinas
Uno de los aspectos más relevantes a la hora de limpiar una oficina es la limpieza de los suelos: las alfombras, el parqué y las baldosas son revestimientos que requieren el uso de productos adecuados y específicos para higienizar a fondo sin dañar el material.
La limpieza de alfombras es una de las operaciones más difíciles de realizar. De hecho, es un revestimiento que, debido a su porosidad natural, tiene una mayor tendencia a atraer y retener el polvo que otros revestimientos. Por lo tanto, es imprescindible desinfectar el suelo con frecuencia. Para ello, sugerimos proceder de la siguiente manera:
- Elimina el exceso de suciedad con una aspiradora al menos dos veces por semana. La frecuencia de esta actividad puede variar en función no sólo del número de personas que pisen la alfombra.
- Las manchas pueden eliminarse dando unos toques a la superficie con una solución de agua y amoníaco.
- Sin embargo, te aconsejamos programar una limpieza a fondo de la alfombra al menos cada 6 meses contactando con los servicios de una empresa de limpieza de oficinas en Alcalá de Henares.
- Si tu oficina tiene suelos de parqué, utiliza productos específicos y naturales para no dañar el delicado revestimiento del suelo.
Limpieza de ventanas
La limpieza de las ventanas de la oficina favorece la iluminación natural de las salas y ayuda a crear un ambiente de trabajo productivo para los trabajadores que pasan el día allí.
Al limpiar las ventanas y los cristales, recomendamos que:
- Rocía una pequeña cantidad de limpiacristales en un paño de microfibra, una escobilla o un rascador. Con movimientos horizontales o verticales, elimina cuidadosamente la suciedad y las rayas.
- Si no tienes detergente, puedes llenar una botella de spray con una solución de alcohol y agua caliente, rocíala sobre la ventana y limpiarla con un paño.
- Dado que a menudo es necesario utilizar las escaleras para limpiar las ventanas, es mejor que esta actividad la realicen empresas profesionales.
¿Cómo se limpia el escritorio?
El escritorio es la parte más importante de la oficina, así como la más personal. Además de los elementos tradicionales como archivadores, ordenadores y teclados, es bueno amueblarlo a tu gusto, decorándolo con marcos, tazas y objetos personales. Por supuesto, la limpieza de todos los elementos del escritorio es esencial para evitar la acumulación excesiva de polvo.
Para limpiar el escritorio, debes:
Despejar los escritorios de objetos diversos, con cuidado de no dañarlos. Es aconsejable vaciar también los cajones y las estanterías, retirando todo lo que no sea necesario.
Con un paño suave, preferiblemente de microfibra, elimina suavemente el polvo con movimientos horizontales o verticales, procurando no dejar rastros de roce.
Para higienizar la superficie, eliminar el polvo y quitar las manchas visibles, lo mejor es utilizar un producto no agresivo o un jabón neutro. Una vez elegido el detergente más adecuado, puedes utilizar una pequeña cantidad y, con un paño, limpiar toda la zona de manera uniforme hasta que la superficie quede brillante
Es importante evitar rociar el producto directamente sobre el escritorio, ya que puede dañar el material.
Si no es posible mover el PC de la mesa, te aconsejamos limpiar la base cuidadosamente, siguiendo sus perfiles: es aconsejable repetir esta operación también para las patas de la mesa, los cajones y la parte posterior de la mesa. Una vez terminado, se pueden llenar los cajones y reorganizar el escritorio. Por último, no olvides vaciar la papelera que hay debajo del escritorio.
Normalmente, es aconsejable limpiar el escritorio con frecuencia, quizá una vez a la semana: así se evita que la suciedad se acumule con el tiempo, se garantiza un espacio limpio y ordenado y unas mejores condiciones de trabajo.
