La calidad de la ciencia y la tecnología en sus proyectos de investigación, la garantía de éxito acumulada por las obras públicas de apoyo a la investigación y el desarrollo y la innovación como el H2020, pero también los logros de las empresas en materia de gestión, ante una mayor innovación, ¿qué obstáculos encontrarán las empresas?
La gente se está dando cuenta de que la innovación, ya sea grande o pequeña, es un factor importante para la competitividad de las economías y las empresas. Sin embargo, esa innovación requiere cierta cantidad de recursos financieros, humanos y materiales, que pueden ser difíciles de dominar para muchos propietarios únicos, especialmente las pequeñas empresas. Incluso si la dirección de la innovación está claramente definida, el posible cambio de las pautas de inversión y producción y la adaptación organizativa al cambio requiere mucho esfuerzo, a veces demasiado, lo que puede ser un obstáculo insuperable.
¿Qué papel desempeñan los centros tecnológicos en una estructura industrial centrada en las PYMES, como la española? ¿Qué define el modelo de centro tecnológico español?
El centro de tecnología juega un papel fundamental en el otro éxito de esta innovación de la empresa. Para las PYMES, los centros tecnológicos ofrecen la oportunidad de acceder a recursos para la investigación, el desarrollo y la innovación, pero nunca pueden hacerlo solos.
Por simplicidad, la función principal del centro tecnológico es acelerar la transformación del conocimiento en valor de mercado. El objetivo es hacer más competitivo el ecosistema empresarial circundante. Es innegable que esta misión se cumple mediante una serie de investigaciones aplicadas y desarrollo de tecnología, que son actividades intensivas en conocimientos y capital.
Esto, unido a nuestra proximidad y posicionamiento en el mercado, nos convierte en el agente más competitivo y dinámico del país en el sistema de I+D+i. Hay una enorme cantidad de datos para respaldar. Y estas son las principales características del modelo español, que, salvo en el caso de la financiación, difiere poco de los modelos similares de otras sociedades avanzadas.
Hemos sabido durante décadas que un sistema fuerte de centros de ciencia y tecnología es un requisito previo para el funcionamiento de un sistema industrial de ciencia y tecnología en una sociedad avanzada. Y el sistema central en España se ve así. Considere que trabajamos con más de 20.000 empresas cada año. Sin embargo, a pesar de los importantes avances en las políticas públicas a nivel nacional, todavía existe una brecha importante entre los países del medio ambiente en lo que respecta al apoyo público, y el Centro considera que es necesario desarrollar y transferir al mercado nuevos conocimientos, aptitudes y capacidades. En los países más desarrollados, el nivel básico de financiación de los centros tecnológicos es innegable, pero es difícil decir que se ha logrado en España. En ese sentido, todavía tenemos un largo camino por recorrer.
¿En qué áreas consiste el Centro de Tecnología Fedit?
Están presentes en todos los sectores de la economía, desde las llamadas industrias tradicionales, las llamadas «industrias estructurales», hasta las nuevas actividades de alta tecnología. Es difícil encontrar un departamento en el que el centro no trabaje estrechamente con las empresas que lo componen.
¿Cómo es que Fedit, como socio estratégico, genera y facilita el uso del conocimiento tecnológico?
Indirectamente, a través de dos rutas principales. Por un lado, tenemos que mirar el papel de los centros tecnológicos en el desarrollo de la tecnología y su impacto en la competitividad nacional. Un estudio sobre el impacto directo del centro, realizado en cooperación con la Universidad de Carlos III, demostró que el centro tecnológico aumentó el volumen de negocios en 2.664 millones de euros y 14.545 puestos de trabajo en seis años. Estos son números muy respetables.
Por otro lado, como principal punto de contacto de la investigación y el desarrollo privados y la industria, Fedit debe promover ante las distintas administraciones nacionales y las distintas instituciones que conforman el sistema científico y tecnológico español las políticas públicas de fomento y apoyo a la investigación y el desarrollo y la industria adecuadas a la estructura productiva española, al tiempo que refuerza el sistema de centros tecnológicos clave para la competitividad del país. Además, fomenta la acción conjunta dentro de la Federación, el intercambio de conocimientos y experiencias, la cooperación activa y el fortalecimiento, la eficacia y la coordinación del sistema de ciencia y tecnología en España y Europa.
¿Cómo contribuye a la competitividad de una empresa?
El valor de un centro de tecnología, a diferencia de otras instituciones de investigación y desarrollo, radica en su posicionamiento, su longevidad en el mercado y el descubrimiento y comprensión de las necesidades tecnológicas actuales y futuras. En el apéndice de la compañía para el estudio y el entrenamiento, el centro alcanza la verdadera esencia de la carta. Como tal, somos un verdadero aliado estratégico que proporciona servicios como la investigación, el desarrollo, la innovación, la transferencia de conocimientos, la previsión tecnológica y las herramientas de financiación.
¿Cuáles son las principales áreas en las que las empresas deberían centrar sus actividades de CTI?
Los diagnósticos generales son un tanto complicados porque cada departamento o empresa tiene que tener su propio plan, identificar su mercado objetivo y poner el ingenio necesario. Pero en cualquier caso, queda la pregunta sin respuesta de la digitalización de la industria española. Iniciativas como la «Agenda Digital» y el programa «Linked Industry 4.0» han contribuido a los cambios necesarios en esta área, pero aún queda mucho por hacer. La combinación de competitividad y sostenibilidad también será cada vez más necesaria en el entorno mundial. Esto ya es muy importante.
¿Qué desafíos tecnológicos debe enfrentar la estructura de producción a corto y mediano plazo?
Parte de la pregunta anterior es también una respuesta a un problema paralelo que la comunidad económica tiene que resolver. Hay muchas formas de diagnosticarlo. Las cuestiones establecidas en el Marco europeo de apoyo a la I+D y la innovación identifican las direcciones que deben considerarse en diversos ámbitos y tecnologías. El Centro de Desarrollo de Tecnología Industrial también diagnostica las principales prioridades tecnológicas del país. Los centros tecnológicos en España ya están trabajando para satisfacer las recientes necesidades de las empresas españolas.